Uno de los ecosistemas más interesantes de la costa cantábrica, lo constiutye la llamada Rasa Costera, un verdadero mosaico de campas, landas, setos, pequeños bosquetes, zonas agrícolas, junto a playas y acantilados. Esta variedad de hábitats permite a su vez una gran diversidad de aves, aunque los momentos estelares suelen coincidir con las épocas migratorias, sobre todo la postnupcial (agosto-octubre), cuando casi cualquier especie de ave, especialmente paseriformes, se puede ve en alguno de estos lugares.
Si bien este ecosistema es abundante en el Cantábrico Occidental (sobre todo, Asturias), en el Oriental, y concretamente en Bizkaia, es más bien por desgracia una rareza. Un ejemplo cualquiera lo constituye el área de Andra Mari, situado junto al puntal oriental del Abra de Bilbao, cerca del Faro de Punta Galea.
Esta foto muestra el itinerario de acceso desde Bilbao, por la llamada carretera de la Avanzada y la autovía de Uribe-Costa, tomando la salida de Berango dirección a Getxo. El resto es seguir el trazo negro.
Una vez en el lugar podemos distinguir 2 áreas bien diferenciadas:
La campiña costera, donde destacan los paseriformes, sobre todo migradores, más alguna especialidad nidificante.
El otro itinerario marcado, es la senda costera donde también existen algunas especialidades propias del acantilado costero, más las aves marinas que se pueden ver desde los promontorios.
En la campiña costera, destacamos 3 áreas fundamentales:
1.- Zona arbustiva, junto al Parking. Es un cuadrado de arbustos, zarzas y espinos rodeado de campas de siega. Es la zona de mayor querencia de aves migradoras.
En migración podemos ver algunas especies regulares pero poco habituales por estas latitudes, como el Alcaudón Común (Lanius senator), Ruiseñor Común (Luscinia megarhynchos), Carricerín Común (Acrocephalus schoenobaenus).
Colirrojo Real (Phoenicurus phoenicurus) hembra
Entre las especies más comunes podemos mencionar a los Papamoscas Cerrojillo (Ficedula hypoleuca), Mosquitero Musical (Phylloscopus trochilus), Mosquitero Común (Phyllosopus collybita), Colirrojo Real (Phoenicurus phoenicurus), Torcecuello (Jynx torquilla), Tórtola Común (Streptopelia turtur), Abubilla (Upupa epops), Curruca Zarcera (Sylvia communis), Curruca Mosquitera (Sylvia borin), Carricero Común (Acrocephalus scirpaceus).
Cigüeña Negra (Ciconia nigra) jóven
Las "rarezas" locales más interesantes son Cigüeña Negra (Ciconia nigra), Paloma Zurita (Columba oenas) y Azor (Accipiter gentilis).
Todavía no he conseguido "levantar" ninguna rareza nacional hasta la fecha, pero es el sitio más prometedor.
La invernada es escasa, siendo la especie más interesante quizá, el Lúgano (Carduelis spinus). Visitantes invernales escasos son el Picogordo (Coccothrustes coccothraustes) y el Zorzal Alirrojo (Turdus iliacus).
2.- Zona de huertas y campas de siega. Buena zona para granívoros y aves de suelo: son abundantes la Collalba Gris (Oenanthe oenanthe), la Tarabilla Norteña (Saxicola rubetra) y la Lavandera Boyera (Motacilla flava iberiae, flava y flavissima) en migración, y la Alondra Común (Alauda arvensis) en invierno.
Tarabilla Norteña (Saxicola rubetra)
Más escaso resulta el Pinzón Real (Fringilla montifringilla) y algunas limícolas de interior como Zarapito Real (Numenius arquata) y Chorlito Dorado Común (Pluvialis apricaria).
3.- Zona de landas. También hay zarzas, un bosquete de pinos y varios manzanos silvestres.
Típico hábitat para la Buscarla Pintoja (
Locustella naevia)
Se puede ver en migración casi lo mismo que en la zona 1, pero lo más interesante aqui son las especies nidificantes, sobre todo, una especialidad cantábrica como es la
Buscarla Pintoja (
Locustella naevia), que canta entre marzo y abril, y que es cuando puede ser visible. También son destacables el
Alcaudón Dorsirrojo (
Lanius collurio), el
Mosquitero Ibérico (
Phylloscopus ibericus) y la
Curruca Cabecinegra (
Sylvia melanocephala).
Buscarla Pintoja (
Locustella naevia) cantando desde una zarza
En invierno se pueden ver algunos ejemplares de Escribano Palustre (Emberiza schoeniclus) curiosamente aquerenciados en los manzanos silvestres.
Acantilados de La Galea
Las especies residentes más destacadas de los acantilados costeros son el Halcón Peregrino (Falco peregrinus) y el Cormorán Moñudo (Phalacrocorax aristotelis), así como el Roquero Solitario (Monticola solitarius), actualmente muy raro, casi extinguido en la zona. En la época adecuada también se puede detectar alguna Buscarla Pintoja (Locustella naevia), en zonas de zarzas y argoma.
Grupo de Cormoranes Moñudos (Phalacrocorax aristotelis) descansando
En migración, y desde algún promontorio costero, se pueden observar alcatraces, pardelas, págalos, charranes y anátidas, durante la migración postnupcial de estas aves marinas, siempre y cuando las condiciones meteorológicas sean las apropiadas para su acercamiento a la costa.
Halcón Peregrino (Falco peregrinus) en un posadero de La Galea
En invierno, se pueden detectar grupos de negrones (Melanitta nigra), álcidos (Alca torda, Uria aalge) y algún Colimbo Chico (Gavia stellata) sedimentados junto a la costa.
Entre las rarezas invernales destacan el Eider Común (Somateria mollissima) ó el Treparriscos (Tichodroma muraria).